Agua

«Si hay magia en este paisaje, sin duda, está contenida en el agua».

paisaj (1)Río Molino nevado         Foto: Conchita Matute

La relación que el pueblo tiene con el agua es intensa, aparte de su importancia como bien y la vida que da a la localidad, los cimballeros están muy orgullosos de sus manantiales, su río, sus acequias y cualquier detalle que recuerde la satisfacción que proporciona gozar de un entorno tan privilegiado.

El paisaje de Cimballa está configurado por el agua, que aparece inesperadamente en parajes inimaginables. La vega propiamente está formada por dos franjas a ambos lados del río, donde se cultivan verduras y hortalizas de gran calidad, junto con una variedad de árboles frutales, todo gracias a la riqueza de agua, que es la característica propia del pueblo.

Esta prodigalidad se debe a la circulación kárstica que se desarrolla entre calizas de la época mesozoica y que origina surgencias de agua en distintos puntos del término municipal.

Junto al río Piedra surgieron batanes donde se moldeaba el esparto; desarrollaron una rica y afamada huerta, crecían variedad de árboles frutales, se lavaba la ropa, los enseres domésticos; se hacían tareas propias de la matanza del cerdo, se daba de beber al ganado, a las caballerías; se limpiaban las cubas de vino, se ponía a remojo la paja, servía de refresco y alivio en la época estival y proporcionaba unos extras gastronómicos que complementaban la economía familiar, gracias a su abundancia de barbos, truchas y sobre todo de cangrejos.

Para los cimballeros el agua representa la mayor riqueza del pueblo, prodigándose en sus acequias, pozos, manantiales y fuentes, atravesando su término y fluyendo tranquila, recorriendo Las Hoces, Los Cantales, pasando por la Fuente, llegando al Llenadero del río Primero (así se le denominaba justo en el puente), añadiendo su caudal con el tramo que origina la Balsa de Los Ojos, el río Molino y con el arroyo que nace desde el molino(Cárcavo), para dejar sus aguas en el río Piedra propiamente, bifurcándose en los Entrerríos y sumándose la que proviene del Molino Bajero y del Batán. 

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                                    Río Piedra: Rincón que llaman el Llenadero

 EL RÍO PIEDRA
Llamado en su tramo alto río de san Nicolás, es un afluente importante del río Jalón (afluente del río Ebro) en su margen derecha. Tiene una longitud de 76 km. y su caudal es muy irregular por ser un río de régimen pluvial mediterráneo. Se consideran como sus afluentes el río Mesa y el río Ortiz.

Este río nace de la unión de una gran cantidad de depresiones cercanas a Molina de Aragón en la provincia de Guadalajara, en Rueda de la Sierra, en la falda septentrional de la sierra de Molina (paraje de la sierra de Caldereros, a 12o0 metros dealtitud, páramos del antiguo señorío de Molina de Aragón). Varios arroyos le surten de agua y abastecen en su cabecera (Arroyo de la Fuente en Cubillejo de la Sierra, Rambla Vieja y Rambla Nueva en Campillo de Dueñas, Arroyos de Peñahita y de la Vega en Cubillejo del Sitio, fuentes en Cillas y Acequia de la Laguna, Rambla de san Nicolás en Tortuera y Rambla del Río en Embid de Ariza.

A lo largo de su recorrido va excavando las rocas calizas de las sierras del Sistema Ibérico y su caudal es tan escaso que solo lleva agua tras las lluvias, el resto del año discurre escondido y su cuenca permanece prácticamente seca a causa de áreas kársticas de intensa infiltración hasta que llega a Cimballa, donde se nutre de los abundantes manantiales y así se constituye el verdadero nacimiento del río, con un caudal regular, aportando 1.400 litros por segundo (Balsa de los Ojos del Piedra) y proporcionando a la cuenca un flujo estable, hacia otras poblaciones o parajes Llumes, Monasterio de Piedra, Nuévalos y embalse de La Tranquera, para desembocar en el río Jalón, entre Castejón de las Armas y Ateca.

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                                        Río Piedra bajando con crecida

Las aguas del Piedra son de notable mineralización y tienen una dureza de grado medio, llevan disuelto carbonato cálcico y al salir al exterior éste se deposita sobre el suelo, las plantas, los musgos, etc. creando una costra caliza que va creciendo progresivamente; de esta manera, todo lo que toca el río se convierte en piedra. De aquí viene el nombre de río Piedra. (Se cuenta que esta denominación se la dieron los monjes del monasterio por ser un río con propiedades endurecedoras).

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                                                                 Manantial Ojos del Piedra

FUENTES Y NACEDEROS
En contraste con el paisaje agreste de su alrededor, Cimballa es un pueblo en donde podemos encontrar numerosas fuentes o nacederos que configuran la característica que hace especial al pueblo: Ser un lugar en dónde el agua está por todas partes, donde la abundancia de manantiales proporciona un encanto natural al terreno, aquí resurgen las aguas infiltradas de la cuenca de Gallocanta. Existen dos zonas de humedal; la mayor, está situada a la entrada del barranco de La Losa y se conoce con  Con el nombre de manantial de El Molino (La Balsa u Ojos del Piedra). La otra, situada aguas abajo, es el manantial de El Batán, y allí se ubica una piscifactoría de explotación privada. Otros manantiales destacados son: Recuenco, el Molino Bajero, la fuente de la Mora, el Tejar, fuente de los Piojos, fuente de Ontanar, fuente de la Cierva (paraje de Guisema).

El manantial de la Fuente de la Mora, fluía atravesando el camino a dicho paraje, en la actualidad se encuentra bastante mermado y se ha redirigido, alejándolo del camino por donde lo cruzaba libremente, tan solo hace unos años.

El nacimiento de El Batán es el más destacado en importancia y caudal, después de los Ojos del Piedra. Sus aguas fluyen constantemente y abastecen la piscifactoría situada en este paraje, en donde la calidad de su agua, hace que los pequeños alevines de las truchas encuentren el medio más idóneo para crecer.

Piscifactoría: Construida en el año 1980. Dedicada a la cría de alevines de trucha arco iris. Pertenece al grupo Piszolla y está situada a las afueras del pueblo. Se abastece de las aguas del nacimiento del Batán y de la Balsa del Molino (Ojos del Piedra). Tiene una concesión de 940 l/s.

Manantial El Molino Bajero (o Huerta Bajera): Cercano al Batán, fluye formando una pequeña balsa desde la que se suministra agua, al pueblo de Campillo de Aragón.

El Recuenco: En este paraje está situado un manantial con la misma denominación.  Se encuentra a un kilómetro aproximado del pueblo, bajo unos cortados de roca que hacen de él un lugar fresco y tranquilo. Hace más de un siglo este paraje se denominaba Cuesta de El Ingenio, nombrando la fuente de igual manera.

Está dividido en dos ramales, uno de ellos se recoge en una acequia, bajo una pared escarpada, y va a desembocar en una canal que cruza el río, haciendo las veces de pequeña pasarela (la Canal).

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                                       La Canal

El segundo  acuífero de la zona, está situado al otro lado del camino, es una pequeña alberca que se aprovecha para el riego.

En el paraje del Recuenco quedan algunos restos del denominado Molino Nuevo, que da nombre al manantial de la zona.

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                                                                          El Tejar

La Fuente de El Tejar estaba diseñada como dos acequias perpendiculares, cuya finalidad era de abrevadero para el ganado, con espacio suficiente para que pudiera beber de ella con comodidad.

Era el lugar donde nuestros antepasados se dedicaron a la fabricación de tejas, aprovechando las vetas de arcilla de la zona y adobes de barro y paja, de ahí la denominación.

Se ha remodelado su entorno, mejorando la fuente, suprimiendo las acequias y habilitando el lugar como espacio de recreo, con algunos árboles decorativos alrededor, está provisto de bancos a modo de merendero.

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                                                      Hontanar
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                                                  Valdelafuen

Valdelafuen  Se encuentra en el paraje de La Cantera, escondida entre monte de carrasca y rodeada de  abundantes matorrales. Fluye lenta   y escondida, está flanqueada por algunos chopos y enmarcada en un paraje agreste, en donde una mesa y un banco, redondeado y rústico, ambos de piedra, componen un sencillo lugar de descanso y sosiego.

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                         Fuente de los Piojos

Fuente del Hontanar: Está ubicada en el monte de La Cantera y consiste en una canalización estrecha al lado de una balsa de riego, que sirve como bebedero para los animales. .

Fuente Los Piojos: Situada a la salida del pueblo, dirección a Abanto. Su enclave está marcado por dos chopos enormes. Alrededor hay tierras de labor.              

Pozo Redondo:  

Pozo del las Mulas:

Pozo Valdeloseis

Fuente de El Topo:

Fuente de Las Monjas:                                                  

La Ballestera:

Fuente del Blinco:  Entre los términos de Cimballa y Llumes, en la margen izquierda del río Piedra

Los Encañaos: Recibe el nombre porque se dirigieron sus aguas para evitar inundar terrenos cultivados. Se encuentran cercanos a la ermita.

Fuente de La Cierva: Se encuentra en el paraje de Guisema, pertenece a la provincia de Guadalajara. Su caudal actualmente se encuentra muy disminuido ante la escasez de lluvias generalizada. Su nombre se debe a los ciervos que había hace más de un siglo por aquellos parajes.

Información: En el año 2001, dentro del plan de la Agenda 21, se llevó a cabo una mejora medioambiental de varios tramos del río Piedra, que comprendía la señalización y adecuación de un sendero que discurre paralelo al río y actuación para la mejora de la zona derecha de la ribera en la cercanía a la localidad.

En 2005 se llevó a cabo un pequeño trasvase de agua al pueblo de Campillo de Aragón, financiado por el Instituto Aragonés del Agua y con una concesión de 1,62 litros por segundo.

Durante el año 2015, se han efectuado algunos trabajos de limpieza de cauce y retirada de árboles o ramas caídas o secas.

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                                                   Los Ojos del río Piedra         Foto: María Álvaro     

Los Ojos del Piedra

Se denomina así a la balsa con tres grandes ojos de unos 4 metros de diámetro cada uno, situada en el mismo pueblo, que abastece de agua al río Piedra y que, gracias a ella, comienza la vida del río propiamente, ya que aporta un caudal de hasta 1.400 litros por segundo, puesto que aguas arriba, el Piedra aparece con el cauce seco prácticamente todo el año.

Con el topónimo de “Ojos” se conocen los humedales o lagunas por los que aflora a la superficie el agua subterránea. Se presentan con formas circulares, bien sean individuales o formando parte de complejos lagunares con abundante vegetación, predominando el carrizo.

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                                                                                Ojo de mayor profundidad

Es un paraje de gran belleza y de interés geológico singular. Como dato curioso se afirma que el ojo más profundo alcanza 11 metros de profundidad.

El origen de esta agua hay que buscarlo en los amplios afloramientos de calizas (zona de Gallocanta), donde se infiltra el agua de lluvia. Una vez que se incorpora a los acuíferos, inicia un lento camino a través de sus fracturas como si se tratara de grandes “esponjas del subsuelo”.

Los llamados Ojos constituyen el desagüe natural de los acuíferos de la cuenca alta del Río Piedra.

Su extensión es de 1 Ha, situados en el paraje llamado Río Molino, debido a que allí se encuentra el molino harinero del que tomó el nombre y que ha sido restaurado recientemente.

Con fecha de 2010, se llevó a cabo una mejora medioambiental de la balsa de los Ojos del Piedra, procediendo a su limpieza y la adecuación por parte de la Confederación Hidrográfica del Ebro.

Desde el monte más cercano, se puede observar y disfrutar de este paisaje, gracias a la construcción de un sendero que discurre ladera arriba hasta llegar a donde se han ubicado dos miradores con paneles explicativos.

Es un espacio natural de reconocido valor ecológico porque mantiene el caudal de estiaje del río, proporciona agua para abastecimiento y regadío y cumple funciones de mejora de la calidad del agua y del paisaje.

Aquí es donde realmente comienza la vida del río Piedra, ya que baja seco la mayor parte del año, aguas arriba del pueblo y gracias a estas surgencias, recupera su esplendor y desciende alegre y con buen caudal, hasta el paraje natural del Monasterio de Piedra y continuando hacia el embalse de La Tranquera.

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                                                                                       Molino harinero

El Molino:  Molino de finales del siglo XVII y principios del XVIII.  Con anterioridad este espacio fue ocupado por uno del siglo XI. Gracias a la restauración llevada a cabo por sus actuales propietarios, podemos verlo funcionar en perfectas condiciones.

Se cuenta que dicho molino llegó a ser uno de los más importantes de la comarca, tenía tres ruedas en pleno funcionamiento y venían de los pueblos de alrededor a moler, cargados con el cereal y regresando con el equivalente de harina, y que se juntaban hasta treinta caballerías esperando turno, para realizar su molienda. Fue una industria muy importante y floreciente en la zona, allá por los años cuarenta.

El mecanismo del molino está basado en la caída del agua, recogida en un pequeño embalse, y regulada por una pequeña compuerta. La fuerza del agua mueve las turbinas y éstas a su vez las muelas, por las que pasan los granos de cereal y se convierten en harina.

Se molía trigo, cebada y maíz para consumo animal principalmente.In

El agua viene de arriba, por una bóveda y gracias a ella se pone en marcha el eje en forma de aspa. La piedra va dando vueltas y chafando el grano hasta transformarlo en harina. La regulación del agua permite variar la velocidad de las muelas, que ha de adecuarse a cada tipo de grano.

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                                                                      Salida de El Cárcavo

El sonido de las muelas era una de las principales herramientas del molinero que marcaba las fases del trabajo.                                          

Río Cárcavo: (Significado de cárcavo: hueco donde gira el rodezno del molino). Se denomina así  al “río” originado a partir de las aguas salientes del molino y que va a desembocar en el Piedra, a la altura de la piscifactoría. Al paraje situado entre ambos ríos se le denominaba anteriormente Cudujón, hoy  Enterríos.

                                                      Restos del Molino Nuevo

Molino Nuevo: Existió un molino en el lugar señalado con ese nombre. Quedan restos de una pared, un lavadero de piedra, una rueda y un      pozo (todo ello restaurado por su dueño hace unos años).

Molino Bajero: Forma una charca no muy extensa en el mismo paraje de el Batán. De allí se ha hecho una canalización para abastecer al pueblo de Campillo de Aragón.

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                                                                       Lavadero

Lavadero:  Data de 1940  y      es de planta rectangular, con tejado  a dos  aguas.  Cuando apenas  se  utilizaba ya, años  80,  se acortó  tapando la entrada  principal,   para anexionarle  un   pequeño matadero.  Actualmente se     ha eliminado el mencionado matadero y se ha reducido su tamaño tapando la puerta principal para adicionar el albergue. Está construido con ladrillo caravista y tiene tres aberturas en forma de ventanales semicirculares a cada lado y dos posteriores (cegados). En su interior había dos piletas (una de lavado y la otra de aclarado). La cubierta está formada por vigas de madera y teja a doble vertiente.

Ha sido siempre el lugar utilizado para lavar la ropa (también se iba al río), enterarse de las últimas noticias y aconteceres y crear un ambiente de camaradería entre las mujeres del pueblo, mientras hacían la colada.

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                                                                        Pesquera

Pesquera:   Denominación dada a una caseta abovedada con forma de arco de medio punto, situada en el paraje del río Molino que, en épocas anteriores, cuando la pesca del cangrejo era abundante y constituía una buena fuente de ingresos extras para la población, servía para guardarlos en unas condiciones óptimas hasta su transporte.

En medio del edificio, a unos centímetros del suelo, la recorre un tubo agujereado por donde el agua fluye constantemente. En la actualidad se encuentra en desuso. Hubo otra caseta al lado, de planta cuadrada, dedicada al mismo fin.

Acequias:  Abastecen de agua la vega de Cimballa. Una de ellas parte del paraje Molino Nuevo, cruza el río a través de la canal y llega hasta el mismo pueblo. La otra acequia viene del río Molino y a través de vasos comunicantes, cruza el río Piedra para regar la margen izquierda.

Albercas: Recogían el agua de lluvia y servían para regar los campos, además de otros menesteres tales como albercar el cáñamo o poner a remojo los haces de paja para fabricar los vencejos.

Pozos: Se constatan varios dentro de la localidad, los lugareños los han utilizado desde siempre para abastecerse con mayor comodidad y en momentos de necesidad, debido a épocas de estío o averías puntuales de la red de abastecimiento.

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                                                                     Noria de cangilones

Norias: Se encuentran en desuso y bastante deterioradas por el paso del tiempo. Son las llamadas de cangilones, de estructura metálica (hojalata y hierro), con un madero (chopo), al cual se ataba una mula o un burro, que caminaba dando vueltas sobre una plataforma circular construida con piedras alrededor del pozo, accionando el mecanismo mediante dos ruedas dentadas y extrayendo el agua para regar la piezaCada una de ellas ocupa un pozo excavado junto al río con la profundidad necesaria para alcanzar la capa freática del lecho.

En este apartado dedicado al agua es importante señalar que, gracias a este bien natural que se prodiga por toda la comarca, podemos disfrutar de varias zonas cercanas con gran interés turístico, que el río Piedra ha conformado a lo largo de su recorrido.

Estos lugares son:  (Véase también Actividades)

Hoces del Piedra
Paraje situado entre los pueblos de Torralba de los Frailes y Aldehuela de Liestos, a 12 km. del pueblo de Cimballa, aguas arriba. Es un cañón fluvial y kárstico formado por grandes paredes verticales que conforman un estrecho valle de cuatro kilómetros de largo. Se han construido varios miradores y se ha mejorado el recorrido para poder disfrutar del paisaje con mayor comodidad.

Cascada de la Requijada
Aguas abajo, poco antes de llegar al Monasterio de Piedra, se encuentra un paraje llamado El Salto de la Requijada.
Aquí, el río forma una espectacular cascada de 14 metros de altura, que cae hasta una poza rodeada de un agradable soto con sauces, olmos y chopos y la típica vegetación propia de las estepas.

Parque Natural del Monasterio de Piedra
El Monasterio de Piedra nos ofrece un paisaje maravilloso con sus numerosas cascadas y grutas, escondido en un entorno agreste. Debe su nombre al antiguo monasterio cisterciense fundado en el siglo XII.

Debe su aspecto actual tanto a la mano de la naturaleza como a la del hombre. Federico Muntadas fue el artífice de su engrandecimiento al construir paseos, túneles y canalizaciones de agua en un recorrido de 5 kilómetros en los que se suceden caídas de agua, rincones pintorescos y donde se puede disfrutar de un paraje de gran belleza y tranquilidad. Está protegido como Bien de Interés Cultural.

Allí se encuentra la primera piscifactoría que se creó en España dedicada a la trucha arco iris y que sirve para repoblar las aguas del Piedra y del Mesa.

De igual forma, merecen ser nombrados, por encontrarse cerca del pueblo y por su gran atractivo turístico y medioambiental:

Laguna de Gallocanta:  Es una zona de agua salada de procedencia subterránea principalmente que está considerada Reserva Natural de Aragón. Constituye un enclave importante de aves acuáticas, desde donde se pueden observar más de 220 especies de aves, destacando las grullas, cuando hacen sus paradas estacionales, además de cigüeñas negras, avutardas, alcaravanes y algún águila real.

Embalse de La Tranquera:  Entorno natural localizado en la población de Nuévalos y que se extiende hacia Ibdes y Carenas,conformando un área de 6,5 km.de largo, con una superficie de 536 Ha. y capacidad de 84 hectómetros cúbicos, recoge las aguas del río Piedra y del Mesa.

Jaraba con su paisaje de agrestes cortados, enclavado en el parque natural de las Hoces del Mesa. Reconocida por tener tres balnearios: Sicilia, Serón y la Virgen.

Alhama de Aragón y sus aguas termales, muy apreciadas desde principios del siglo XX y mejor aprovechadas por sus propiedades terapéuticas. Posee también balnearios: Hotel Alhama y Termas Pallarés.

«No se puede descender dos veces por el mismo río, pues cuando desciendo el río por segunda vez, ni el río ni yo somos los mismos». Heráclito